Alcalde melgariano incompetente
Ha transcurrido un año y tres
meses desde que asumió el cargo el alcalde de Mariano Melgar, Edwin Martínez
Talavera, y sigue perdido en el espacio de administración y gestión municipal,
tan caótica es su gestión que no puede resolver ni los problemas de baja
intensidad como es el recojo de basura, el combate al pandillaje, ni hablar de
llevar adelante las obras de envergadura donde se destroza vías aun estables en
vez de reasfaltar aquellas que realmente la necesitan.
La
desgracia de la basura
En lo que va el ejercicio
del 2016, se ha suscitado dos ocasiones en la que el recojo de basura ha sido
una desgracia. A finales de enero falló el recojo de basura a raíz de la
renuncia de uno de los funcionarios, esto propició el descontento de los
vecinos melgarianos quienes a través de los hilos telefónicos de los medios
radiales, dieron a conocer el retraso de casi una semana el recojo basural, al
alcalde no le quedó otra salida que solicitar ayuda a la comuna de Paucarpata,
municipio que le otorgó un volquete.
Una vez remolcado la
basura, trabajadores de esta comuna tomaron la decisión (quizás por órdenes
superiores), de llevar la basura y amontonarla en el vivero municipal,
produciéndose un daño grave al ecosistema. Este hecho propició que el regidor
en minoría Alejandro Núñez, denunciara el caso ante el Ministerio Público.
A transcurrido dos meses
del pésimo suceso de contaminación y el problema del recojo de basura de ha
vuelto a presentar. El lunes y martes último, los carros recolectores nunca
aparecieron, generándose en todo el distrito un basural. ¿Qué sucede en la
comuna que no resuelven cosas tan sencillas?, ¿qué intereses mezquinos se
juegan?
Lo cierto es que los
grandes perjudicados por la ineptitud de gestión del alcalde melgariano, son
los vecinos quienes tienen que soportar los malos olores, la abundancia de moscas,
presencia de perros callejeros, y la falta de prevención de la contaminación,
mayor aun cuando han iniciado las labores escolares.
¿Obras
indebidas?
Si bien es saludable que
las autoridades municipales trabajen por el mejoramiento de las vías de
comunicación, estas sin embargo tienen que ir de la mano con una política de
análisis y evaluación exhaustivas de lo que se quiere hacer.
El alcalde melgariano a
inicios del año ha tenido el atrevimiento de destruir la vía de la av.
República de Chile, a pesar que, esta se encontraba en mejores condiciones en
relación de otras vías, tan pésimas son las decisiones municipales que
iniciaron las obras en tiempos de lluvias lo cual ha tenido sus implicancias.
Dos días antes del inicio
de las lluvias en Arequipa, una mala maniobra del operador de la maquinaria
pesada hizo romper la llave matriz de agua potable, generando un rio intenso y
las inundaciones a varios vecinos de la República de Chile. Dos días después, a
la llegada de las lluvias, esta obra de reasfaltado se ha convertido en lodo,
barro, riachuelos, lo peor de todo, es que en el ánimo de detener el destrozo
de la obra como consecuencia de las lluvias y la ruptura de desagües, la
constructora trasladó tierra en volquetes colocándolas en las laterales de las
vías de la obra, vale decir en la calle 29 de agosto, de esta forma
perjudicando por completo a vecinos que tuvieron que soportar no solo las
lluvias, sino las heces y olores nauciabundos, que si no era por el llamado a
Sedapar, hasta hoy los vecinos de San Martín estuvieran viviendo en medio de la
contaminación.
La población se pregunta,
¿qué tiene el alcalde en sus decisiones de hacer obras?, ¿por qué no analiza
las consecuencias de la destrucción de vías medianamente estables?
En Mariano Melgar existen
varias vías que cuentan con más de 20 años, algunas hay que reasfaltarlas, pero
otras sencillamente rellenar los agujeros. Por colocar dos ejemplos de la
ineptitud e incompetencia del alcalde melgariano, son las vías de la calle
Venezuela que está a un costado del mercado de San Martín ¿Por qué no se
reasfalta esa vía? Otra vía completamente dañada es calle Comandante Canga a la
altura del colegio Manuel Veramendy que más parece una carretera recién salida
de la guerra mundial, pero al parecer para el alcalde melgariano le es más
importante destruir las vías medianamente en buen estado y dejar abandonadas
las vías casi destruidas.
Sergio Gonzales Apaza
Periodista
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