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lunes, 16 de enero de 2017

No podemos resignarnos a votar por el sida y el cáncer

No podemos resignarnos a votar por el sida y el cáncer
                       
Las encuestadoras a nivel nacional nos muestran que hay 3 niveles de candidatos presidenciales; el primero liderado por Keiko Fujimori, le sigue Julio Guzmán, PPK, Cesar Acuña y Alan García; en el segundo nivel se encuentran los que pelean por subir un escalón, ahí están Veronika Mendoza, Alfredo Barnechea, Nano Guerra, Alejandro Toledo, Urresti y Fernando Olivera; en tanto que el tercer nivel presidencial están los que tienen menos del 0.5%, vale decir, todos los demás candidatos.

¿Es posible que los peruanos tengamos que resignarnos a votar por los del primer nivel?, ¿acaso no tenemos derecho a tener un o una presidenta ecuánime que garantice una democracia con crecimiento económico sostenible y que se identifique con los sectores sociales mayoritarios del Perú profundo?

Como se podría ir a las urnas y votar por quien fue parte integrante de la dictadura, que se educó con la plata de todos los peruanos, que vivió en las instalaciones del Servicio de Inteligencia junto a su hermano que encontraron en su almacén 100 kilos de droga; como votar por quien el año 2000 intercedió para que dos narcotraficantes sean liberadas cuando se les encontró droga en una camioneta hilux, y lo peor de todo, una hija que permitió que torturen a su madre y para el colmo de los descaros y sin sentido humano, usurpó el cargo que le correspondía a su madre, me refiero a Keiko Fujimori quien como parlamentaria tuvo una labor inferior a Susy Díaz.

Acaso tenemos que ir a las urnas a votar por quien es financiado por los grandes consorcios empresariales nacionales y de las transnacionales capitalistas, pregunto si los peruanos tendremos que elegir a quien en su plan de gobierno refiere que incrementará el ISC pero cuando lo entrevistan en los canales dice que reducirá el ISC. Los peruanos no podemos estar sentenciados a votar por quien primero dice ser judío y luego católico, por un Julio Guzmán que en una ocasión dice que derogará la ley de Consulta Previa pero al percatarse de la patinada dice que respetará la Consulta Previa, entre otras contradicciones como el matrimonio Gay.

Los jóvenes acaso tienen que apostar por PPK quien nos ha gobernado desde la sombra desde 1958 que ingresó al aparato del Estado y siempre ocupo diferentes cargos ministeriales y finalmente terminó siendo un gran lobista de los transnacionales que depredan la mar, el ecosistema y entregan los recursos nacionales a los capitales internacionales.

Imagínense tener como presidente de la república a Cesar Acuña y asista a una reunión internacional y diserte un discurso de orden en las Naciones Unidas, Comunidad Andina, Cepal o los grandes núcleos de Estados que se integran y compiten  económicamente y todos los asistentes salgan burlándose de la forma en que leyó ,claro si logra leer. Como elegir por quien sin descaro humilla la inteligencia de los peruanos afirmando que lo del libro de su ex profesor de universidad no fue plagio sino copia, o que tengamos que ser gobernados por quien se copiará a imagen y semejanza la forma de gobernar de un país europeo o latinoamericano con realidades diferentes a nuestro país.


Acaso es posible que tengamos que elegir a Alan García que colocó en libertad a los narcotraficantes y jefes de las bandas delincuenciales. Estoy seguro que si mañana fueran las elecciones, el ganador con los votos de los penales sería nada más que Alan García Pérez, es decir, los delincuentes, narcotraficantes, violadores, secuestradores, y el ampa de calle miserable, hoy deben estar contentos con García porque al menos, están dentro de las –pocas pero esta- posibilidades de ingresar a una segunda vuelta. No me explico cómo las leyes permiten participar al expresidente denunciado por violar los derechos humanos, desfalcos económicos, irregularidades en Agua para Todos, compras de tanques y ambulancias sobre valoradas, como se puede tener de candidato a quien en su gobierno se gestó un genocidio como Bagua y las muertes de pobladores del valle de Tambo.

Sergio Gonzales Apaza
Periodista

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