Señor presidente, Tía María ya
fue
Luego
de 66 días de huelga indefinida de los pobladores y campesinos del Valle de
Tambo, el Gobierno “nacionalista” tomó la decisión declarar en Estado de
Emergencia la provincia de Islay.
Se
ha puesto en marcha una serie de detenciones, la policía ingresa a las casas en
las madrugadas “presuntamente” para capturar a los integrantes de los
autodenominados “Espartambos”, se saca de las casas a varones en calzoncillos,
insultan y denigran a las mujeres, dañan psicológicamente a los niños,
amedrentan a las autoridades de la jurisdicción, los alcaldes del Valle de
Tambo denuncian que son hostigados por efectivos policiales y que se los
estarían chuponeando, y un grupo de periodistas migran a las ciudad de Arequipa
buscando refugio por los hostigamientos de la policía.
Todo
este accionar puesto en marcha por el gobierno es para doblegar al pueblo
tambeño y pretende descabezar la dirigencia que tiene una posición firme en
relación de la presencia del proyecto minero, en tanto los pobladores del valle
han logrado romper la cadena recurriendo a los cacerolazos y las veladas en sus
domicilios, nadie los puede acallar porque solo defienden la vida y la de las
futuras generaciones.
El
gobierno y la minera Southern han perdido en todos los escenarios, desde lo
político hasta lo social. Hoy el problema del valle de Tambo, es de todos los
peruanos como se viene demostrando con las medidas de lucha en cada región.
Las
organizaciones sociales de Arequipa se han comprado el pleito llevado a cabo 4
medidas de fuerza en solidaridad con el Valle de Tambo, protestas que han ido
de menos a más. Las regiones de Moquegua, Tacna, Cuzco, Puno, Ayacucho,
Cajamarca, Apurímac e Ica acaban de participar de un paro macro regional con el
único punto de plataforma de lucha, “solidaridad con el Valle de Tambo” a lo
cual se ha sumado las organizaciones juveniles de Lima.
En
el congreso de la república las posiciones se han dividido, por una lado la
bancada de Democracia y Dignidad, Fuerza Popular y Acción Popular han pedido
que el proyecto minero se suspenda, mientras que las bancadas del APRA, Gana Perú,
Solidaridad Nacional y el PPC apuestan porque que el proyecto vaya sí o sí.
Los
colegios profesionales de Arequipa, el Colegio de Abogados, la Asociación de
alcaldes de Arequipa, el alcalde de la municipalidad provincial de Arequipa,
los alcaldes de la provincia de Caylloma, La Unión, Castilla entre otros, han
llamado a que el Gobierno suspenda proyecto minero de Southern; mientras que en
la otra ladera la Cámara de Comercio, el Club Internacional, La red de
Comunicadores y el Gobierno Regional de Arequipa hacen el llamado a detener a
los violentistas y se imponga la ley, en otras palabras, que se imponga el
proyecto minero a costa de la vida de otros.
A
nivel de los medios de comunicación nacional y local, las posturas también se
han abierto; por un lado la prensa que cataloga a los pobladores y agricultores
del valle de Tambo como “antimineros” y a los protestantes en Arequipa como
“violentistas y azuzadores”, mientras que otro sector de la prensa dice estar
del lado del pueblo. A nivel de los organismos representativos de los
periodistas las posturas son en dos ángulos; por un lado el Colegio de
Periodistas de Arequipa junto al Centro Federado de Periodistas de Arequipa han
hecho silencio ante la intromisión del Ministerio Público en los medios de comunicación,
mientras que la Asociación Nacional de Periodistas y el Sindicato de
Periodistas de Arequipa han emitido un pronunciamiento condenando este accionar
de la fiscalía y condenando la forma en que el gobierno viene actuando con los
pobladores del valle de Tambo.
Si
antes el problema del Valle de Tambo era solo de los pobladores, agricultores,
dirigentes, autoridades y periodistas de la provincia de Islay, ahora la lucha
del valle de Tambo es de todo el Perú. El valle Somos Todos señor presidente, y
no por militarizar el país, crea que doblegará la convicción de un pueblo que
solo defiende el agua, la agricultura, la vida.
Sergio Gonzales Apaza
Periodista
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